Otro caso de gestación por sustitución de vientres fue noticia y volvió a evidenciar el vacÃo legal en que se encuentra esta práctica que sin dudas sucede. Una pareja de varones de Buenos Aires tuvo un hijo que hoy tiene 3 años a partir de una subrogación de vientre. Quien lo facilitó fue N , una mendocina y se concretó con esperma de uno de los varones y óvulos donados. Pese a que la Justicia lo habÃa avalado en primera instancia ahora una fiscal lo apeló para señalar que la mujer gestante es la progenitora. Todos envueltos en un limbo jurÃdico que deja las decisiones en manos del criterio de cada juez.
Al no existir normativa al respecto debe apelarse a medidas judiciales que apliquen a cada caso por lo que estas técnicas se encuentran judicializadas.
En Mendoza, ya hay 5 fallos al respecto y dos en proceso. De ellos, todos han resultado favorables pese a que intervinieron 4 jueces diferentes. Por otra parte a nivel nacional se estima que son cerca de 40 y obtuvieron resultados en el mismo sentido. Los mendocinos corresponden a dos parejas heterosexuales que recurrieron a personas conocidas y una pareja de médicos heterosexuales que recurrió a la mamá de un paciente de uno de ellos. Otro fue el de una abuela que dio a luz a sus nietos trillizos y otra pareja heterosexual que recurrió a la hermana de la mujer.
Quedan dos pendientes de resolución, uno de los cuales es una pareja de varones.
Un proyecto presentado en la Legislatura local define la gestación por sustitución como la técnica de reproducción humana médicamente asistida mediante la cual una persona gestante recibe la transferencia de un embrión y lo gesta hasta el nacimiento, supliendo la incapacidad de gestar o de llevar un embarazo a término de una persona o pareja con el fin de que el niño nacido tenga vÃnculos de filiación con los comitentes.
EL VACIO NOS LLEVA LA DERIVA
Lo que no está prohibido está habilitado, esa serÃa la consigna. Sin embargo, no es tan simple que no haya un marco normativo lo que en definitiva resta equidad y garantÃas.
Lamm señaló que la jurisprudencia suele estar a favor pero esto no es suficiente: “está empezando a recorrer un camino pero no es seguro porque depende del juez que toque y eso viola el principio de igualdad. Seguimos creyendo que gestar es sinónimo de maternidad y de criar pero cuesta romper con estas normas heteronormativas y heteropatriarcalesâ€.
En el proyecto del Código Civil y Comercial que fue modificado en 2017 se incluÃa un artÃculo -el 662- que regulaba la subrogación de vientre. Sin embargo este fue eliminado y las cosas quedaron en el limbo una vez más.
Por ello se trata -como se puede- de resguardar el vÃnculo y darle garantÃas al niño y al resto de las partes, no sólo por al identidad sino incluso en caso de herencia.
“Hay un grupo del feminismo que no está de acuerdo asà como también sectores eclesiásticos. Con este vacÃo legal se continuó judicializando la situación porque hoy el Código Civil establece la filiación con la persona que da a luzâ€, detalló Lamm.